Consejos para una buena salud femenina

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Cada vez es más común entre las mujeres la presencia de un malestar recurrente en la zona íntima como infecciones, molestias con la menstruación, cambios en el estado de ánimo cíclicos y otros.

Su resolución, contrario a lo que se cree, no está en una botica, si no muchas veces en establecer rutinas que favorecen el bienestar y acá te contamos las más importantes.

1. No abuses de alimentos procesados. Son presupuestables, altamente deliciosos, fáciles de conservar y consumir, pero ricos en azúcares y grasas inflamatorias que promueven cambios hormonales que favorecen molestias como cambios en el pH e infecciones, menstruación irregular, fatiga crónica y otros. Sabemos que la sociedad no promueve que usemos tiempo para prepararnos la comida balanceada de la cual está hecha cada rincón de nuestro cuerpo, pero es bueno que uses los fines de semana para cocinar algunos productos saludables que puedes refrigerar e ir llevando para la semana.

2. Mantén una hidratación adecuada. Esto para mantener las mucosas produciendo moco protector todo el tiempo, de modo que disminuya la irritación y la tendencia a infecciones urinarias. No abusar tampoco que obligue ir al baño a cada rato, pues si no, ese mismo hecho puede también ocasionar irritación.

3. Usa ropa holgada para el día a día y procura que la ropa interior sea de algodón. Este permite una mejor absorción y permite que la zona se humedezca menos y se ventile mejor. No es aconsejable usar protectores diarios de rutina. Si tienes mucho moco recurrente no es por la falta de protectores, visita mejor a tu especialista de confianza y descarta infecciones y otras causas de moco aumentado.

4. Duerme 8 horas la mayor cantidad de días que puedas. Sabemos que con las exigencias de hoy, muchas deben trabajar y luego estudiar y las horas de sueño se acortan. Pero cuando se pueda, nada es tan importante como dejar que el cuerpo se recupere del desgaste que imprime el día. La hormona reparadora solo aparece si uno se acuesta antes de las 10 de la noche y la melatonina ha demostrado disminuir el riesgo de ciertos cánceres como el de mama.

5. Muévete. Caminar, estirarse, limpiar la casa, no se necesita un gym para ello, pero si dedicarle al menos 10 minutos al día a un ejercicio funcional que refuerce la musculatura. Por miles de años nos hemos movido para cazar y recolectar y nos adaptamos a ello. Ahora como hay delivery nuestro cuerpo sabe que no está obligado a moverse, pero eso ocasiona mucho malestar a corto o largo plazo.

6. Acude a controles anuales con tu especialista de confianza. Los cambios preocupantes en los órganos femeninos en etapas iniciales, que son las etapas curables, muchas veces no dan síntomas al comienzo. Por ello el control de rutina es muy importante.

Y recuerda que en el IMM vamos más allá de los exámenes de prevención y detección temprana pues aparte de ello tenemos un enfoque orientado a buscar la causa de las molestias crónicas y recurrente y corregirlas para evitar que regresen.